Como mamás queremos que nuestros hijos estén totalmente sanos, por lo que siempre estamos atentas a cualquier dolor o molestia que tienen. Pero, ¿qué pasa cuándo necesitan lentes por daños en la vista? ¿Cómo detectamos eso? No te preocupes, hoy te daremos toda la información que necesitas.
Antes que nada, debes de saber que la mayoría de los médicos oftalmólogos y optometristas, dicen que no hay una edad mínima para que nuestros hijos usen lentes. Sin embargo, la Academia Americana de Oftalmología ha establecido ciertas pautas para decidir si un pequeño necesita lentes o no.
Con el uso de los lentes se pueden corregir tres problemas visuales: el astigmatismo, la hipermetropía y la miopía. Y aunque te vamos a decir cómo puedes detectar que tu hijo necesita lentes. Recuerda que es importante acudir con un médico especialista para que le de un diagnóstico más acertado.
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Así es como sabrás si tus hijos necesitan lentes
- Detecta el estrabismo
Si ves que tu hijo necesita inclinar la cabeza para mirar unos puntos en concreto, sus ojos no se mueven a la vez en la misma dirección, se frota los ojos constantemente o cierra un ojo para desenfocar es un problema de la mala alineación de ojos. Un problema que se puede corregir en la infancia.
- El ojo vago
Este problema se puede dar por herencia o si tu hijo nació prematuro. Es un problema de retina y tienes que estar alerta ante estas señales: dolores de cabeza o de cervicales, confunde letras al leer.
- Problemas de refracción
Aquí entran los problemas de miopía y la hipermetropía. Se puede manifestar a los 6 años y estos son los síntomas más comunes: confundir personas que se encuentran a larga distancia, prefieren actividades que requieren ver de cerca, acercan los objetos para leer y entrecierra los ojos para enfocar.
Tips para conseguir los mejores lentes para tus hijos
Los lentes no solo sirven para ver, también serán parte de la personalidad de tu hijo y es un objeto que llevará puesto la mayor parte del día. Por lo que te daremos unos tips para que elijas los mejores lentes para tus hijos. ¡Presta atención!
- Elige la montura del tamaño adecuado a su rostro.
- El material tiene que ser ligero, cómodo y seguro en la montura.
- Revisa que el puente de las gafas se apoye bien en su nariz.
- Las varillas deben de tener la longitud adecuada.
¡Eso es todo! Ahora mamá estás lista para saber cuando tu hijo podrá necesitar lentes y cómo elegir la mejor opción de entre tantos modelos que hay en el mercado. No olvides que es importante que un profesional diagnostique a tu pequeño antes de que le compres sus lentes, más que nada para saber que problema padece.