CUIDADO DE LOS HIJOS

¿Cómo sé que mi bebé está deshidratado?

La deshidratación en bebés puede ser peligrosa si no se trata a tiempo.

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Empieza la primavera en México y con ella, las olas de calor. Debido al calentamiento global, las temperaturas suelen ser más extremas y en nuestro país, los expertos predicen nuevos récords. Es por eso que hoy te traemos algunos tips para saber si tu bebé está deshidratado. 

Y es que en esta temporada, este es un tema que debes prestarle mucha atención, pues si no son hidratados correctamente pueden tener algunos problemas de salud. Recuerda que siempre es importante que hables con tu médico pediatra para saber qué hacer en estos momentos. 

¿Qué es la deshidratación?

La deshidratación en bebés es un estado en el cual pierden más líquidos de los que ingieren. Esto puede suceder debido a diversas causas, como enfermedades como la diarrea, vómitos o fiebre, el clima caluroso que aumenta la transpiración del bebé, o una ingesta insuficiente de líquidos, ya sea por no tomar suficiente leche materna o leche de fórmula.

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¿Cuáles son los síntomas de un bebé deshidratado?

Para identificar si un bebé está deshidratado, hay señales leves a moderadas como boca y labios secos, llanto sin lágrimas, fontanela hundida en bebés pequeños, menos deposiciones o pañales mojados de lo habitual, irritabilidad o somnolencia. Mientras que las señales graves pueden incluir ojos hundidos, manos y pies fríos y pálidos, piel arrugada, respiración rápida, letargo o confusión, y fiebre alta.

Para prevenir la deshidratación en bebés, se recomienda amamantar a demanda, ofrecer leche de fórmula o agua con frecuencia, especialmente en climas cálidos o durante enfermedades, y evitar dar bebidas azucaradas. Es importante recordar que la deshidratación en bebés puede ser grave, pero se puede prevenir y tratar. Si hay alguna pregunta o inquietud sobre la deshidratación del bebé, es recomendable consultar con un médico.

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¿Es peligroso que mi bebé esté deshidratado?

La deshidratación en bebés puede ser peligrosa si no se trata a tiempo, ya que puede provocar complicaciones graves como daño cerebral, convulsiones, shock e incluso la muerte. Si el bebé muestra signos leves a moderados de deshidratación, se le debe ofrecer líquidos con frecuencia, preferiblemente leche materna para bebés menores de 6 meses y leche de fórmula, agua o soluciones de rehidratación oral para bebés mayores de 6 meses.

Si los signos no mejoran o empeoran, se debe buscar atención médica de inmediato. En caso de deshidratación grave, es necesario buscar atención médica de inmediato, ya que el bebé puede necesitar ser hospitalizado para recibir líquidos intravenosos. No olvides seguirnos en Facebook