En la maternidad, la lactancia es una parte vital del cuidado del bebé, y las madres deben ser conscientes de cómo ciertos hábitos afectan a la leche materna. En estas fechas, es común que en las fiestas siempre haya alcohol, es por eso que aquí te decimos qué pasa si tomas alcohol y le das pecho a tu bebé.
Es esencial recordar que la lactancia es la mejor manera de alimentar al bebé, y se recomienda continuarla hasta, al menos, el primer año. Si se elige consumir alcohol, es crucial planificar con cuidado para evitar poner en riesgo al bebé. La salud y bienestar del niño deben ser siempre prioridad durante la lactancia.
Esto es lo que pasa si tomas alcohol y estás amamantando
El consumo de alcohol es una práctica que debe ser abordada con precaución durante este período. Investigaciones indican que incluso pequeñas cantidades de alcohol pueden afectar al bebé. La lactancia y el consumo de alcohol no son compatibles, ya que cualquier cantidad de esta en la leche materna se considera riesgosa para el bebé.
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Aunque los bebés reciben solo una fracción de la cantidad de alcohol que consume la madre, su capacidad para metabolizarlo es más lenta, lo que puede afectar su desarrollo motor y patrones de sueño. Investigaciones sugieren que la exposición diaria puede tener efectos adversos. Consumir alcohol reduce la producción de leche y la presencia de alcohol en ella conlleva a que los bebés ingieran menos leche.
Si la madre decide consumir alcohol, se recomienda evitar amamantar hasta que haya pasado completamente del sistema. La eliminación natural del alcohol lleva de dos a tres horas para ciertas cantidades y tipos de bebidas. Optar por tomar después de una sesión de lactancia ayuda a minimizar la exposición del bebé.
Extraer y desechar la leche no acelera la eliminación del alcohol, pero puede ayudar a mantener el suministro de leche y prevenir la congestión mamaria si se omite una sesión de lactancia. No olvides seguirnos en Facebook.